Hay algunos recuerdos de mi infancia que se me grabaron indeleblemente de un periodo que abarca desde mi nacimiento hasta mediados de la década 1950-1960. En el pueblo viví continuamente sólo hasta los 11 años, a partir de los cuales por razones de estudio solo residí en Guadalcanal las vacaciones de Semana Santa y Navidad y los meses de verano.
Al narrar algunos acontecimientos, soy consciente de que la memoria es caprichosa y selectiva. Digo esto porque hablando con personas de mi edad he podido constatar, que si bien había situaciones, personas y acontecimientos de los que compartíamos el recuerdo y nuestras evocaciones no diferían, había otros hechos y situaciones que recordaban otros y no yo y viceversa.
Los años de mi niñez transcurrieron en la posguerra civil, que tan dura fue para tanta gente. Nuestros padres trataron, y lo consiguieron, de que no nos enteráramos de todos los hechos dramáticos que lamentablemente ocurrieron, aunque algunos fueron tan notorios, como describo más adelante, que se quedaron grabados para siempre en mis neuronas. Otros los he conocido cuando tenía más de 50 años. Las fechas precisas que doy no son fruto de mi memoria, sino de los documentos ahora disponibles que complementan mis recuerdos.
Aquella fue una infancia tranquila porque todo estaba controlado y de lo que no se tenía noticia era como si no existiera. No obstante, era inevitable que el rescoldo de la guerra fratricida se colara en las conversaciones. No era raro, el empleo por parte de la gente del verbo significar que se usaba con profusión para referirse a los que lucharon en el bando de los perdedores. Así, por ejemplo, se oían a veces frases como; el marido de esa huyó a Francia donde vive porque se significó mucho, y no era raro el caso de mujeres que tenían maridos, hermanos e hijos viviendo en el país vecino. A este respecto quiero resaltar un dato del que me enteré en 1996 cuando tenía 55 años. Entonces conocí a un paisano mucho más joven y a su madre, quien me contó que seguía habiendo gente en Guadalcanal que desde aquellos tristes años no pasaba delante de las paredes del Casino de la Plaza donde habían tenido lugar fusilamientos, que ojalá no se repitan jamás.
Mi primer recuerdo es una manifestación en la villa, supongo que simultánea a la de la Plaza de Oriente de Madrid, que gracias a Wikipedia puedo datar el 9 de diciembre de 1946. Entonces yo contaba 5 años y 8 meses. La marcha de Guadalcanal estaba encabezada por el Guarda de la Plaza que portaba un retrato en color sepia del General Franco, e iba seguida por la gente entre los cuales estábamos muchos niños que no entendíamos nada, gritando desaforadamente Franco si, comunismo no. La evocación de ese Guarda, con una hendidura semiesférica en la frente, supongo que resultado de una herida de guerra, la recuerdo como si la estuviera viendo ahora, al igual que la imagen procaz que componía cuando regaba la Plaza o El Palacio con una manguera terminada en un pitorro rígido de alrededor de medio metro.
Cómo no recordar la monotonía de la vida cotidiana que se alteraba con la celebración de la Semana Santa y la llegada del verano que se cerraba con la Feria (que entonces se celebraba del 4 al 7 de septiembre) y la Velá en la Plaza. El verano era la época en la que, por razones climáticas, actuaba más frecuentemente la Banda de Música Municipal, que, si no me equivoco, hasta bien entrado la década de los años 60 nos despertaba con dianas, junto con cohetes, los días 18 de julio y el 19 de agosto, fechas que si algo no debían haber sido era celebrables. Es curioso que en aquellos años de penuria el Ayuntamiento pudiera permitirse el lujo de una banda de música, que luego desapareció a medida que la emigración diezmaba la villa, y que no volvimos a tener hasta la llegada del cura Antonio Martín Méndez genuino representante del nacionalcatolicismo. De aquella primera banda de mi infancia recuerdo sus conciertos en el tablao situado en el centro de El Palacio, en el que los paseantes nos deteníamos especialmente cuando interpretaba El sitio de Zaragoza. De sus componentes había dos que eran muy populares, uno era Rajamantas (Rafael Caballero Ruiz) empleado municipal, sepulturero, pregonero, y otros menesteres, que como otro empleo tocaba la pesada tuba. El otro era mi primo político Jesús Escote Vázquez, virtuoso del clarinete, conocido popularmente por el Nene, que era diestro en cualquier actividad a la que se dedicaba, pues fue un magnífico carpintero que era su profesión principal y durante un tiempo empleado público en el Servicio Nacional del Trigo en Lora del Río.
De la presencia de la religión en la vida del pueblo hay un episodio que recuerdo, por atípico, ya que creo que se produjo en una sola ocasión. Se trata de las Misiones de los Franciscanos que instalaron un potente altavoz en la Torre de la Parroquia con el que a todo volumen atronaban la Plaza con la cantinela “Guadalcanalense la Virgen te avisa, que vayas a misa, si te quieres salvar”. Al igual que en otros pueblos de la comarca, en el nuestro casaron -echaron las bendiciones decían muchas personas- a parejas que convivían conyugalmente, pero fue en Constantina donde saltó la anécdota, pues una señora dio a luz, al día siguiente de recibir el sacramento, lo que dio lugar, a que un ingenioso, en una tierra como la nuestra tan aficionada a los apodos, la denominara “La olla exprés”.
Nunca olvidé el asesinato de un agricultor el 22 de mayo de 1948 cuando yo era un niño de 7 años y tres meses. Lo único que permanecía en mi memoria era el nombre de pila del protagonista asesinado, Ricardo; la calle de Guadalcanal donde vivía, Concepción; la casa de dos pisos (con un zócalo verde grisáceo) en la que habitaba, que era la que hay justamente al lado de la que fue del notario Pedro Porras Ibáñez, situada en la acera de los impares de la calle Concepción, y finalmente el nombre de su mujer, Matilde. No recordaba los apellidos de Ricardo, el cargo que ocupaba en la Finca y el nombre de ésta. Tampoco puedo precisar ahora como denominaba la gente a los crueles autores del vil asesinato (¿maquis, guerrilleros, rojos…?). A esa temprana edad junto con mi hermano Rafael ya frecuentaba la calle Concepción porque en el número 22 (hoy 24) vivían nuestros abuelos maternos.
En el pueblo hubo una gran convulsión que nuestros padres no pudieron ocultarnos. Tuvieron que transcurrir sesenta y un años, concretamente en el verano de 2009, cuando pude conocer los datos que no recordaba, tras leerlos en la Biblioteca Nacional. El cruel hecho está descrito en las páginas 503/504, en el texto que reproduzco del capítulo titulado «Actuaciones de la guerrilla en 1948, entre Córdoba y Sevilla» del libro cuya portada se reproduce.
<<El 22 de mayo, encontramos a «Godoy» y a «Durruti» en plena acción sanguinaria en la que eran expertos. Ese día trataron de eliminar a Ricardo Cabezas Romero, encargado de la Finca Tierra Firme, de Guadalcanal, afecto al régimen, falangista y somatén. Cuando por la mañana iba revisando los sembrados le capturaron. Después, mandaron recado al cortijo para que mataran veinte gallinas y fueran preparando la comida del mediodía. A las tres de la tarde bajaron todos a comer, junto con el personal de la finca. Se liquidaron dos arrobas de vino, tras lo cual cantaron canciones guerrilleras y obligaron a Ricardo a levantar el puño y dar vivas a la República. A las 5 de la tarde se lo llevaron atado, alejándose unos 500 metros, mientras «Godoy» señaló el alcornoque para ahorcarlo. Intentó tirar de la cuerda, pero no pudo porque iba completamente borracho. Se puso a tirar «Durruti» en igual estado, y se le cayó al suelo. Entonces se lanzó sobre él y le asestó 18 puñaladas. Su cadáver fue pisoteado por todos. Dejaron una nota que decía. «En el día de la fecha ha sido juzgado por el Tribunal del Ejército Nacional de Guerrilleros, habiendo sacado pena de muerte, por ser Falangista, criminal y somatenista, que durante el movimiento se dedicaba a fusilar a trabajadores, y en el año 43 intervino en la muerte de un trabajador en la plaza pública de Guadalcanal, y por acompañar a la guardia Civil a buscar la pista de los guerrilleros, siendo ajusticiado por los hechos arriba expresados. En Campaña a 22 de mayo de 1948». El capitán Jiménez hizo detener a todos los moradores del cortijo.
El autor, el historiador F. Gómez Moreno, que obviamente escribe desde el lado de los vencidos, califica adecuadamente a los autores principales de sanguinarios, Godoy y Durruti. Por lo demás, poco que añadir al texto a falta de un gran periodista como el sevillano Manuel Chaves Nogales, cuya existencia nos ocultaron los unos y los otros, hasta su reivindicación tardía hace pocos años cuando ya hacía mucho tiempo que había muerto en Londres.
Tampoco he olvidado la inauguración el 6 de junio de 1951, del Pantano del Pintado, parte de cuya superficie se encuentra en el término de nuestro pueblo. Las obras se iniciaron en 1948 y la inauguración, por parte del General superlativo, tuvo lugar en la fecha citada cuando yo contaba 10 años y unos meses y estaba en la Escuela Nacional de niños Nº 5, que dirigía Don Francisco Ortiz Mantrana. Los días anteriores al evento los niños fuimos invitados -es un decir- a recibir al Caudillo en El Coso, donde tenía previsto pasar camino de la Presa. Para tal recibimiento gastamos bastante tiempo en confeccionar unas banderitas con la imagen de Franco, con la que tempranamente nos desplazamos -mejor sería decir nos llevaron- a El Coso, en aquella mañana de junio que, por cierto, recuerdo nublada y bastante fría. Pero tras una larga espera la máxima autoridad del Estado nos dio plantón, pues el general con su nutrida comitiva llegó al Pintado por otro camino. Naturalmente a la gente que estábamos en El Coso no se nos dio ninguna explicación, pero mi amigo Salvador Isern recuerda que se dijo que era porque había llovido y las carreteras estaban en mal estado. Otra explicación posible del cambio de itinerario es que tal vez fue debido a motivos de seguridad, lo cual es explicable si se tiene en cuenta la presencia en aquellos años del Maquis en el entorno de nuestro pueblo. Es sabido que el famoso guerrillero José Murillo Ríos, el comandante Ríos, tras pasar varios meses refugiado curándose en el chozo Banasto, sito en El Porrillo, donde fue herido en agosto de 1947, fue detenido en una finca próxima a Guadalcanal el 31 de octubre de 1949.
Quien no estaba aquel día en El Coso era el alcalde de Guadalcanal en aquellas fechas, que respondía al nombre de Francisco Gómez del Valle, falangista y propietario de una tienda de ultramarinos en la calle Santiago. Según se dijo por poco lo mata la Guardia Mora en El Pintado, pues cuando ocupaba un lugar destacado en el embalse junto con otros alcaldes de la zona, llevado por su fervor hacia el Caudillo parece que hizo un intento de adelantarse gritando, preso de gran excitación, algo así como: “Me llamo como tú, nací el mismo día que tú y soy un fiel…”. Fue la intervención de otro alcalde, creo recordar que el de Constantina, quien lo salvó gritando: “¡¡¡Es el alcalde de Guadalcanal!!!” cuando ya lo tenían encañonado, pensando que intentaba aproximarse al Dictador.
Casi tres años después, el 6 de mayo de 1954, recuerdo perfectamente cómo a eso de las 14 horas los siete miembros de mi familia estábamos comiendo el habitual cocido, con las puertas abiertas del comedor que daba al patio, pues hacía un buen día de primavera. De repente se oyó un ruido seco, una explosión que mi padre identificó sin dudar como un tiro. A los pocos minutos todo el pueblo, o al menos los que vivíamos en la parte baja, supimos que Paco el alcalde se había suicidado. Las circunstancias que concurrieron para que el Sr. Alcalde tomara tan trágica decisión parece que estuvieron relacionadas con rumores que circularon por el pueblo acerca de su honradez en el manejo de los fondos municipales. Supongo que tal vez otro colaborador del libro en que aparecerá insertado este texto pueda aportar más datos. Un hecho lamentable y triste. Yo recuerdo la figura de Paco en su tienda vistiendo un guardapolvo que los profesionales del comercio gastaban entonces, y solo una vez con la camisa azul de Falange. Se me hace difícil creer que el rumor respondiera a la realidad, pues parecía un buen hombre, pero lo cierto es que no pudo superar aquellos momentos difíciles.
El lector que haya llegado hasta aquí pensará, con razón, que lo recordado son mayoritariamente hechos trágicos, pero ni se elige el momento histórico en que se nace, ni los hechos que suceden en la infancia, ni los que se recuerdan con más o menos precisión. Ya me hubiera gustado evocar un panorama distinto como que: a) no hubiera sucedido la Guerra Civil; b) que el pueblo no hubiera perdido a partir de entonces millares de habitantes; c) que, junto a la industria oleícola, tan limitada en el tiempo, no hubiera habido filoxera y Guadalcanal fuera una denominación de origen en el sector vinícola con un tinto denominado Rinconete y un blanco Cortadillo, recordando la mención que el genio de Alcalá hizo de los que fueron nuestros caldos; d) que no se hubieran agotado los filones de la famosa Mina de Pozo Rico o que en su defecto la tuviéramos visitable con fines pedagógicos y turísticos como sucede con la Jayona en la vecina población de Fuente del Arco; e) que de una vez por todas nuestro monumento medieval La Almona estuviera restaurado y aislado de las casas circundantes, para ser visitable y aumentar el valor de nuestro patrimonio monumental; f) que en los veranos se hubieran celebrado en nuestro pueblo Jornadas dedicadas a la Emigración a las en el siglo XVI llamadas Indias, con especialistas del Archivo General de Indias, pues méritos teníamos de sobra al ser uno de los pueblos que más emigrantes aportamos a lo que hoy es Centro y Sudamérica, y muchas cosas positivas que hubieran contribuido al bienestar y prosperidad de los guadalcanalenses.
José María Álvarez Blanco
Agradecemos a José Mª Álvarez los primeros recuerdos que han leído y quizás, como él dice, podemos considerarlos trágicos, pero es la realidad que se vivía en estos primeros años de la posguerra. Aunque desde muy pequeño marchó de Guadalcanal, primero por estudios y después por trabajo, José Mª sigue viviendo mentalmente en nuestro pueblo, la prueba la podemos ver en la decenas de artículos con los que ha colaborado en la Revista de Ferias. Naturalmente, nos gustaría que todo lo que dice al final, pudiera en algún momento hacerse realidad. Gracias.
Cuando se inicia este año 1941, la Comisión Gestora del Ayuntamiento estaba compuesta sólo por tres miembros: Manuel Gago Rodríguez, alcalde accidental; Manuel Alonso Silva y José Parrón Rodríguez. La situación en el pueblo era de verdadera calamidad, ya que como consecuencia de la guerra y la sequía en los dos últimos años, se ha llegado a una situación crítica por la falta de artículos de alimentación de primera necesidad.
Por el acta de la sesión ordinaria del Ayuntamiento del 17 enero 1941 tenemos noticia del nombramiento de Guarda de El Coso al caballero mutilado, Miguel López Rincón. Se acuerda contribuir con 75 pesetas para la adquisición de una imagen de la Virgen del Pilar. También se conviene comunicar a la Inspección de 1ª Enseñanza, que el salón de la calle Ramón y Cajal, anexo al número 10 de la calle Comandante Rodrigo, se encuentra ya en condiciones para instalar una escuela nacional, proponiendo la de niños número 5.
En el aspecto ganadero, el año no empezó mal, ya que el 26 de enero, el Gobernador Civil de Sevilla declara extinguida para el término municipal de Guadalcanal la infección de la peste porcina.
El 31 de enero de 1941, se vuelven a reunir los Gestores Municipales y se acordó el recargo del 15% en el impuesto de la Contribución Industrial, según la reciente reforma tributaria.
Después de años de sequía, ahora llueve y de qué manera. Los Gestores quedaron enterados que debido al temporal de lluvias, se ha producido el derrumbamiento en el cementerio de San Francisco en la Sección A, tramo 1º del patio 1º, por lo que se ha realizado el traslado de los restos afectados a otros nichos.
En el segundo punto del orden del día, se trata un asunto de suma importancia para Guadalcanal y sus monumentos, ya que el Alcalde informa a los asistentes del escrito del Sr. Cura Párroco, que traslada el oficio del Arzobispado de Sevilla, autorizando la venta al Ayuntamiento de la iglesia de San Sebastián, excluida la sacristía y el patio. El precio será no inferior a 23.500 pesetas, libres de todo gasto. La Comisión aprobó la adquisición con el fin de alinear la calle Santiago y se estudiará la adaptación a Mercado Municipal de Abastos. Por último, también se aprueba la adquisición de una placa sobre la entronización del Sagrado Corazón de Jesús.
En la sesión ordinaria de los Gestores Municipales del 5 de febrero, se vieron algunos desajustes que tenía el presupuesto para ese año, que asciende a un total de 295.247 pesetas. Se acordó arrendar la casa en calle Concepción 40, propiedad de Encarnación Chaves Moyano, para la instalación de la Parada de Sementales del Estado, por el precio de 200 pesetas por cada temporada.
De cómo está la situación en Guadalcanal, lo podemos ver por el acta del 25 de febrero, ya que se reunieron los Gestores Municipales en sesión extraordinaria para estudiarse aplazar la ceremonia de consagración de este pueblo al Sagrado Corazón de Jesús, que se había fijado para el cuatro de marzo, debido a la situación de verdadera calamidad existente en el municipio, agravada en estos días a la falta de artículos de la más imperiosa necesidad. Se acordó suspender el acto hasta la fecha que oportunamente se aprobará en contacto con el R. P. Mariano Ayala, S.J.
En la sesión ordinaria del 15 de marzo, queda aprobada la liquidación del presupuesto de 1940, por un importe efectivo de gastos de 311.305 pesetas. También se aprueba que se tramite un expediente de presupuesto extraordinario para la adquisición de la iglesia de San Sebastián para adaptarla a Mercado Municipal y reformar con adoquines la pavimentación de las calles General Franco y Concepción. Igualmente se acuerda contribuir con 1.000 pesetas para remediar la catástrofe del Cerro de Águila de Sevilla[1].
El 23 de marzo se celebra sesión extraordinaria, con los siguientes asuntos: Aprobar el presupuesto extraordinario para la adquisición de la iglesia y adaptación a Mercado Municipal y ensanche de la calle Santiago, por importe de 65.000 pesetas y otras 60.000 pesetas, para el adoquinado de las calles General Franco y Concepción.
No esperó el Ayuntamiento para formalizar la adquisición de la iglesia de San Sebastián al Arzobispado, ya que el 2 de abril se reúne la Comisión Gestora y apodera al Alcalde para que formalice la compra por el precio de 23.500 pesetas. Se excluye la sacristía y patio, así como las campanas, cancel, pila de bautismo y las dos puertas grandes existentes. También se designa como Alguacil del Ayuntamiento al Guardia Municipal, Antonio Veloso Romero.
En la sesión extraordinaria del 7 de abril, se informa de que han cesado en sus cargos los componentes de la Comisión Gestora que lo ocupaban hasta el día de hoy, según telegrama del Gobernador Civil de Sevilla. En el mismo telegrama se nombra a los siguientes componentes:
| Alcalde | Antonio Limones de la Hera |
| Primer Tte. Alcalde | José de la Hera Moreno |
| Segundo Tte. Alcalde | Joaquín Llamazares Caravaca |
| Tercer Tte. Alcalde | Manuel López Blandez |
| Síndico | José Mª Rivero Yanes |
| Gestor | Ignacio Vázquez Rodríguez |
| Gestor | Rafael Cárdenas Ordoñez |
| Gestor | José Yanes Criado |
| Gestor | José Quintero Caballero |
| Gestor | José Blandez Chaves |
En el acta del 16 de abril, se resolvieron los siguientes asuntos: Se dio cuenta de la petición que formulan los albañiles contratista de las obras del cuartel de la Guardia Civil, motivada por la elevación de precios en materiales, así como la imposibilidad de colocar algunas viguetas de hierro, por la falta de existencias en el mercado. Se informa que en el ejido de El Coso se vienen ocupando, por los horneros de tejares, terrenos del citado ejido que pudiera dar origen a litigios, por lo que se acuerda llamar la atención, principalmente a Antonio Llano Trancoso. El siguiente acuerdo que se toma, nos vuelve a dar una idea de la situación por la que atravesaba el municipio, que va a hacer obligatorio el enterramiento de los animales muertos, cuando antes se dejaban para alimento de los buitres y otras aves carroñeras, acordándose por la Comisión Gestora la necesidad de que todos los animales muertos sean enterrados a profundidad conveniente, designándose como lugar apropiado el ejido de las Erillas, tapándose con una capa de tierra de al menos dos metros e informando a todos los vecinos por edictos y pregones de la prohibición de desenterrarlos, cosa que estaba ocurriendo, bajo pena de las sanciones establecidas.
Comienza un nuevo mes y la Comisión Gestora se reúne el día 1 de mayo, para ver los siguientes asuntos: Se aprobó el pago a los farmacéuticos de las medicinas a pobres de los meses de Septiembre a Diciembre del pasado año. Rogelio Vázquez, 928 pesetas y Joaquín Isern, 2.356 pesetas. El Alcalde informa que ya se ha escriturado la compra de la iglesia de San Sebastián, por un costo total de 23.758 pesetas, que tiene una superficie de 573 m2, cuya capacidad es más que suficiente para las necesidades de la población. Se acuerda vender a los hermanos Luis, Rafael y Ángel Rius Palacios 169 m2 en la parte norte con fachada a la calle de Santiago, por 7.015 pesetas.
El 16 de mayo, se aprueba un aumento del costo de la obra de ampliación del cuartel de la Guardia Civil, de 3.235 pesetas, cerrando con este importe las reclamaciones que habían realizado los constructores. También se aprueba el cambio de las viguetas de hierro por otras de madera de castaño, abonando el Ayuntamiento un sobrecosto de 1.275 pesetas, por lo que el importe total de la obra será de 74.500 pesetas.
Como había pocos problemas, uno nuevo aparece en el pueblo. La Comisión quedó enterada de la circular de la Inspección Provincial de Sanidad, dando instrucciones sobre la epidemia de tifus, acordándose darles traslado a los médicos y que se prohíba en absoluto la mendicidad.
El uno de junio se reúne la Comisión Gestora en sesión ordinaria tratándose varios asuntos. Se consagra oficialmente el Ayuntamiento y la población al Sagrado Corazón de Jesús, aprobándose el siguiente texto y fijándose el 19 de agosto del mismo año para la ceremonia de la entronización (cambiándose al 31 de agosto en la sesión del 16 de junio). Por ello, para atender a los gastos, se acuerda tramitar expediente para suplementar en 4.000 pesetas el crédito del capítulo de fiestas.
“A la Comisión Gestora de este Ayuntamiento. España se consagró oficialmente al Sagrado Corazón de Jesús levantando en el Cerro de los Ángeles un grandioso monumento, posteriormente arrasado por la horda, desde el que se irradiaba a toda la Nación el fervor religioso, siendo faro potente de la catolicidad del pueblo español. Postulado del nuevo Estado es la incorporación del sentido católico a la reconstrucción nacional; teniendo este principio efectivo desenvolvimiento oficial desde la iniciación del Glorioso Movimiento, por inspirarse la cruzada contra el marxismo en el lema “Por Dios y por España”. Guadalcanal se colocó un día bajo la protección del Sagrado Corazón de Jesús, permaneciendo milagrosamente ilesa la placa de la venerada imagen en la fachada de la iglesia parroquial; más para que la incorporación de nuestra tradición católica tenga expresión oficial, el Alcalde que suscribe tiene el honor de someter a la Comisión Gestora municipal la adopción del siguiente acuerdo: Que se consagre oficialmente el Ayuntamiento y la población al Sagrado Corazón de Jesús, mediante la colocación de su Imagen en la presidencia de la Sala Capitular y de su placa en la fachada principal de esta Casa Consistorial, debiendo celebrarse estos actos con la mayor solemnidad”.
Surge por primera vez un tema, que va a estar de actualidad durante el periodo que estamos estudiando, ya que se acuerda en esta sesión, la construcción de un Grupo Escolar con doce secciones y vivienda para el conserje, y doce viviendas protegidas para los maestros. Que el Grupo Escolar se construya por el Estado, mediante la aportación del 20% del Ayuntamiento. Como iremos viendo, se aprobarán y se tendrá que anular el acuerdo por no poder asumir los gastos de la construcción.
En la sesión ordinaria del 16 de junio se vieron los siguientes asuntos: Se incrementa el sueldo de los médicos de asistencia pública domiciliaria y médico de la Casa de Socorro, en la cantidad de mil pesetas anuales. Por otra parte, en atención a que le faltan a la esfera del reloj público algunas piezas, que en esas fechas no se encontraban en el mercado, se acordó adquirir otra esfera transparente de una sola pieza, lo más resistentes posible.
Teniendo noticias la Corporación de que algunos pequeños industriales, de solvencia dudosa, han puesto en circulación vales para facilitar cambios, se acordó ordenar la recogida inmediata.
El secretario Adrián Salinas, informa a los presentes que ha sido nombrado para la secretaría del Ayuntamiento de Ronda. Entra en varias consideraciones, como que lleva quince años, aquí ha formado su familia y tiene sus bienes su esposa. Que con este nombramiento tendría más categoría y representación. Dejando la resolución de la cuestión para el momento oportuno, se cree en el deber de informar al Ayuntamiento, ya que la designación tiene estado oficial por su publicación en el Boletín del Estado. La Comisión Gestora por unanimidad hizo constar: Que el Ayuntamiento está satisfecho de su comportamiento por la conducta ejemplar… y aunque comprenden el perjuicio que para él representa y los lazos de amistad que tiene en Guadalcanal, le piden se sacrifique y continúe como Secretario de la Corporación, que tan dignamente ha sabido desempeñar en todo momento y en cuyo cargo lo consideran insustituible.
Se inicia el segundo semestre de este año 1941, con una sesión Ordinaria de la Corporación el día primero de julio. Se informa a los asistentes de la documentación recibida referente a los concursantes a la plaza vacante de Interventor de este Ayuntamiento, que serán llamados de acuerdo al orden en el escalafón.
El 9 de julio se reunió la Comisión Gestora en sesión extraordinaria, para tratar el asunto sobre la construcción de un Grupo Escolar y vivienda protegidas para maestros. Se informa a los asistentes de las condiciones en que se realizaría las obras y de las que regirían en el empréstito necesario para ello. Se sometió a votación y al no obtenerse una mayoría de dos tercios, no se pudo adoptar el acuerdo.
De nuevo el 15 de julio se reunió la Comisión Gestora y se vieron los siguientes temas: Se designó una Comisión compuesta por los señores Llamazares, López, Parrón y Yanes, para que formen una relación de vecinos a quienes puede serle alojada la Guardia Civil concentrada. Que las relaciones del Consistorio y los mandos de la Falange no son muy buenas, lo demuestra la pregunta que realiza el Teniente Alcalde Sr. Llamazares, de las causas de no haberse cumplimentado el acuerdo de 16 de mayo último, prohibiendo la mendicidad, contestando el Sr. Alcalde que porque el Jefe de Falange no había querido.
El 2 de agosto el Alcalde dio cuenta de los incidentes ocurridos con motivo del abastecimiento de pan de la población, que motivaron se encargara de la Alcaldía el Primer Teniente de Alcalde, por orden del 22 de julio, dictada por el Sr. Gobernador Civil, hasta ayer, en que nuevamente se reintegra a su cargo, aclarados dichos incidentes. Se anuncia la provisión de varias plazas para el Ayuntamiento: Oficial 2º Secretaría, con 3.600 pesetas anuales; Recaudador de arbitrios, 4.000 pesetas; Auxiliar Administrativo, 3.000 pesetas; Guardias Municipales, 2.350 pesetas; Barrendero municipal, 2050 pesetas y Conserje del Cementerio, 2050 pesetas. Se tendrá en cuenta para estas contrataciones, la legislación vigente sobre Caballeros Mutilados.
La situación alimentaría en el pueblo afecta hasta a los animales, ya que el 16 de agosto se contesta a la comunicación del Jefe del Depósito de Caballos Sementales, en el sentido de que está asegurado el suministro de paja para alimentación de todos los animales.
De nuevo el cementerio municipal es noticia, ya que se informa que varias secciones de nichos pueden desprenderse en cualquier momento, por lo que se acordó prohibir nuevas inhumaciones y realizar las obras que sean necesarias.
Finalmente, el Secretario informa de su nombramiento definitivo para la secretaría del Ayuntamiento de Ronda.
Se accede a lo solicitado en su escrito por Juan Campos, de cobrar el alquiler del local para la escuela de niñas nº 2 y la vivienda para la profesora, de 75 pesetas mensuales.
También se acuerda formar una Comisión para que se traslade a Sevilla a visitar al Jefe del Tercio de la Guardia Civil, para informarle la deficiencia en los servicios que se producen en Guadalcanal.
La Corporación hace constar en acta del uno de septiembre, la satisfacción que le ha producido la ceremonia de la entronización del Ayuntamiento al Sagrado Corazón de Jesús, celebrada el día de ayer.
Se acordó adquirir doce sillones para la Sala Capitular -la calidad de la compra que se realizó es manifiesta, ya que aún existen los citados sillones en el Salón de Sesiones-. De igual forma, se compraron uniformes para la Guardia Municipal, en vista del mal estado de los que están usando.
El 8 de septiembre de 1941, nacía en Guadalcanal el que llegaría a ser un gran poeta y escritor, Andrés Mirón Calderón, en la calle de la Encomienda. Cursó Filosofía y Letras en la Universidad Complutense de Madrid, al mismo tiempo que iniciaba su actividad poética publicando algunos poemas y dando recitales. Residía en Sevilla donde ejerció de profesor y se casó con la pintora granadina, Conchita Díaz Cerezo Condic con quien tuvo dos hijas, Soledad y Esperanza. Tiene cerca de treinta libros de poemas y narrativa publicados, y obtuvo numerosos premios de carácter nacional e internacional. Parte de la obra de Andrés Mirón ha sido traducida al inglés, portugués, francés, italiano y alemán. Su dilatada obra se vio truncada, en plena actividad literaria, por un fatal accidente de tráfico cuando se dirigía a Guadalcanal el 8 de octubre de 2004. Al año siguiente de su muerte fue nombrado Hijo Predilecto de la Villa de Guadalcanal y se rotuló la calle donde nació con su nombre.
En el año 2006 tuve la satisfacción, siendo Concejal Delegado de Cultura del Ayuntamiento de Guadalcanal, de editar y publicar su obra Historia de Guadalcanal, edición que fue patrocinada por José María Álvarez Blanco, Salvador Isern Anglada y el Ayuntamiento de Guadalcanal.
El Telégrafo va a cambiar de dirección, así el 11 de septiembre en la sesión extraordinaria celebrada, se acuerda alquilar una habitación en la casa de la calle Muñoz Torrado nº 8 para la instalación de la Estación Telegráfica municipal por el precio de 20 pesetas mensuales. Y allí siguió, hasta que Correos asumió el servicio.
También se aprobó solicitar a la Jefatura provincial de Sanidad, el nombramiento de un médico interino de asistencia pública, por la vacante dejada por el médico Aurelio Astudillo Martínez, que ha sido trasladado a Puebla del Río.
Para poder terminar las obras del Cuartel de la Guardia Civil, se aprobó un aumento del presupuesto extraordinario de 71.998 pesetas, lo que llevará a un total de 102.691 pesetas el costo final de la obra.
El 30 de septiembre se celebra sesión ordinaria de la Comisión Gestora. En primer lugar quedan enterados y acordaron prestar exacto cumplimiento a la circular del Gobernador Civil de la provincia del pasado día 27, sobre moralidad y buenas costumbres.
Se hace constar, después de los trabajos realizados por la Junta Municipal del Censo, que al 31 de diciembre último había los siguientes habitantes censados: Varones, 3165, Hembras, 3.762. Ausentes: Varones, 516; Hembras, 79. Transeúntes, 2 varones y 2 hembras. Población Derecho: 7.520; Población de hecho: 6.931.
Se cambia la escuela de Párvulos de la calle José Antonio a Calvo Sotelo, aunque sigue siendo la misma casa y se seguirá pagando las 75 pesetas por el local y la vivienda. En cuanto a las obras del Cuartel de la Guardia Civil, una vez acabadas éstas, se aprueba la contratación de la luz y la adquisición de una bomba de agua para el pozo.
Nueva sesión ordinaria de la Comisión Gestora el 16 de octubre, donde se acuerda conceder un mes de licencia por enfermedad al cabo de la Guardia Municipal, José Mª Bernal Álvarez. También se informó que el día 7 del mes actual, tomó posesión de su plaza de Guardia Municipal el caballero mutilado José Chaves de la Rosa.
En la sesión celebrada el 15 de noviembre se informó que ya se habían adquirido los catorce sillones para la Sala Capitular, por el precio de 3.500 pesetas. En atención al crecido número de niños en edad para asistir a la escuela de Párvulos, se acordó solicitar una nueva escuela de esta clase. Por último se acordó comunicar a la Diputación de Sevilla, la conformidad para la construcción de veintitrés viviendas protegidas en el plazo de dos años, dedicada a casa-habitación de maestros nacionales y solicitar un préstamo a dicha Corporación provincial del diez por ciento del importe, que constituye la aportación municipal, o sea 57.500 pesetas.
El 31 de diciembre de 1941, se celebró la última sesión ordinaria donde se aprobó una reforma del presupuesto del presente año, que ascendió a un aumento de 18.100 pesetas, quedando un presupuesto total de gastos para 1941 de 338.888 pesetas.
[1] Poco antes de las diez de la mañana del 14 de marzo de 1941 hizo explosión el polvorín de Santa Bárbara, sumiendo en la catástrofe la humilde barriada del Cerro del Águila, en Sevilla, que dejó varias víctimas mortales y redujo a escombros alrededor de trescientas viviendas de autoconstrucción en más de diez manzanas de la zona, dejando sin hogar a más de 2.500 personas, que fueron acogidas en dependencias del Matadero Municipal, donde Auxilio Social les proporcionó víveres, colchones y mantas.