Guadalcanal es uno de los pueblos de la Sierra Norte sevillana que más encanto reúne para turistas, tanto en la época estival como en otras del año, ya que su clima fresco, su abundante caza menor y la cordialidad de sus habitantes hacen de él un lugar cordial para el descanso. Es el último pueblo al norte de la provincia de Sevilla y dista de la capital unos ciento diez kilómetros. Bello conjunto arquitectónico en el que destacan muchos monumentos histórico-artísticos, principalmente de carácter religioso. En la actualidad está pendiente de ser declarado este pueblo como conjunto histórico-artístico.
Guadalcanal tiene aceptables condiciones de comunicación con la capital. Su estación de ferrocarril está junto al pueblo y cuenta con servicios de trenes diarios y con dos líneas directas de autobuses a la capital.
Para diversión y recreo hay numerosos lugares. Una discoteca, varios pubs, ventas instaladas al aire libre en zonas ajardinadas y numerosos bares donde se pueden degustar comidas típicas.
Funcionan como restaurantes La Repostería del Casino, el bar Silvia, el Cebollino, el bar Andalucía y el bar Nuevo.
Para pasear hay extraordinarios lugares, los paseos del Palacio y del Coso, donde hasta altas horas de la madrugada, en el segundo, funcionan sus terrazas de verano y la típica venta La Parrita. El cine Emperador es de los mejores acondicionados de la zona.
A Guadalcanal acude cada año, en la época de caza, Su Majestad el Rey, que suele pasar un fin de semana en la finca Altarejo, propiedad de don Carlos March y en la que abundan numerosas especies de todo tipo y sobre todo perdices.
Cuenta este pueblo con dos bandas de cornetas y tambores, una de música y un coro-rondalla que a menudo ofrecen conciertos en la popular plaza de España. Es curioso ver en estos conciertos al párroco de Guadalcanal, don Antonio Martín Méndez, con su larga sotana y la batuta en la mano dirigiendo la banda de música o bien tocando, si hace falta, la trompeta. La Feria de Guadalcanal se celebra en los primeros días del mes de septiembre y se organizan dos romerías en honor de Nuestra Señora de Guaditoca, patrona de la localidad: una de ellas en abril y la otra en septiembre.
La Velá de Santiago y Santa Ana, que se ha celebrado en los pasados días en la barriada del mismo nombre, se organiza desde hace pocos años, pero ya ha alcanzado una gran popularidad en toda la zona.
Entre los veraneantes distinguidos de Guadalcanal se encuentra el catedrático de Literatura y académico de Buenas Letras, Juan Collantes de Terán, quien pasa aquí todo el verano. Igualmente pasa largas temporadas el ex presidente del Senado y catedrático, Antonio Fontán. El señor Fontán acaba de restaurar una finca familiar, Villa Susana, donde pasa parte del verano. Igualmente ha adquirido a la Iglesia la antigua ermita de San Benito, que ha salvado de una segura destrucción y que ha reconstruido a sus expensas.